viernes, 29 de noviembre de 2013

buscando sueños

Por fin ha caído la noche y llevo ya horas esperándola. Buscándote palabras para un cuento, para regar de emociones la noche, para que las horas de tu descanso se llenen de historias amables.
Me he parado a rebuscar entre los besos que un día me diste, entre los que te dí y los que nos robamos. Estuve andando despistada por el almacén donde las cosas imposibles se quedan atascadas, a la espera de que alguien crea en ellas.
Durante miles de micro segundos me quedé ensimismada registrando en la caja de los recuerdos, pero todos se habían vuelto de color sepia, entintados de la tinta del calamar que ensepia las fotos, que se emborronaron con lágrimas derramadas en el papel grueso de tu carta antigua, vieja ya de tanto uso, de tanta lectura buscándote en cada letra.
Hoy llevo años esperando la noche para encontrarme con tu recuerdo ausente. Siento tus gélidos besos en mi mejilla ardiente y no consigo atrapar tu vida, no consigo que tu helado beso me temple el frío, me temple el corazón que se quedó bajo cero sin ti.
de tu ausencia, solo me salva en el ocaso la chispa helada que el filo de la luna navaja rasga en el negro de la media noche.
Hoy tengo ya muchas horas esperando el sueño, pero por mas que espero, el sueño siempre viene sin ti. Hoy me vence el cansancio, ese humano desgaste que requiere la desconexión temporal del sistema operativo...
Hoy tampoco viniste a escuchar mi cuento de buenas noches..
Te echo de menos abu

Inma Castrejón, la bruja de chocolate

lunes, 25 de noviembre de 2013

Corazón loco

Aich, corazón loco!
Loco y roto, y repartiendo pedazos.
Trozos de amor descontrolado, besos de pasiones infinitas...
Aich, corazón loco!
Como tequila sin sal, como noches de sueños despiertos, como piel sin vestido, como arena en los pies, como brisa en el pelo, como miradas eternas...
Corazón loco, loco, loco!
Repartiendo a tiras las verdades y las mentiras, dejando pasar el viento huracanado, el levante fiero, el poniente frío, los vendavales de otoño y las tormentas de invierno...
Corazón, loco, loco, loco! 
Loco y desconsolado, loco y despojado, loco y muerto de frío, muerto de amor, muerto de sueños, muerto de ti y de mi, muerto de locura de corazón loco...
Y después del corazón solo me queda la vida. La vida sin tu corazón loco...

inma Castrejón, la bruja de chocolate

domingo, 24 de noviembre de 2013

Mi corazón de trapo



La semana se termina debiendo horas al tiempo.

Han ocurrido tantas cosas en tan pocos días, hemos hecho, dicho, construido tanto que, ha sido una semana de 365 días.

Ayer fue primavera, todo el día, desde que amaneció, abrí la ventana y me atrapó el olor recordado de mis naranjos florecidos.

Viajé por un puñado de horas al lugar donde vuelven las aves huyendo del calor, huyendo del frío. Y me quedé en la candela que se enciende en el alma y miré en la inmensidad de la marisma y ví como las nubes fueron, vinieron y volvieron a marcharse.

Ayer fue primavera por todo el día, anoche se hizo verano y el amanecer volvió a traer el invierno...

Esta semana ha tenido muchos días, muchas primaveras y muchas ventanas cuajadas de flores, salpicadas de jazmines y acariciadas por el encaje del visillo translúcido.

Muy buenas noches desde mi corazón de trapo!

Inma Castrejón, la bruja de chocolate

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Quizás...quizás...quizás



Sabes lo que ocurre?
que todo lo que escribo en esta zona blanca de mi vida, termino por borrarlo.
No se que les pasa a mis palabras, a mis sueños, a mis fantasías. 
Quizás nos estamos haciendo mas viejas, mas aburridas, mas amargas...
Quizás los días estén tan repletos de vida que no queda hueco para mis palabras bailarinas..
Quizás el invierno anochece demasiado deprisa nuestro frágil y cansado corazón de bruja de chocolate...
Quizás se haya agotado el chocolate...
Quizás, solo quizás, sea la magia la que se está diluyendo en los fríos incipientes de noviembre...
Quizás el presente y los números estén apagando el son de mis letras con tacones de aguja...
Quizás mis primeras arrugas no quieran contar que ya no encuentro a la bella en el espejo, que ya se desvanece la frescura, que ya el tiempo quema, que ya... que se pasó el tiempo de amar, que se marcharon los amores para siempre, que nunca mas habrá un amor para la marchita bruja de chocolate...
Quizás sea que me hace falta un poco de silencio entre tanta gente...
Hoy te necesito.

Inma Castrejón, la bruja de chocolate